Vilavilani no va, asegura el dueño de la chacra

Por Marden Rojas

Cuando todos en Tarata esperaban escuchar la palabra mesurada y de respeto del gobernador de Tacna, Luis Torres Robledo, habló el capataz de la chacra para asegurar que "Vilavilani no va, eso ya lo saben. No sé por qué le dan tanta importancia. Mi posición es clara: no se llevará a cabo. Nació muerto y así seguirá" (Sin Fronteras, 3/9/2023).

Entendemos a las comunidades puneñas que están en desacuerdo con el proyecto, porque les han vendido el cuento de que la captación y conducción de las aguas superficiales que se encuentran en territorio tacneño, van a servir a la minería y no para cubrir el evidente déficit existente del 35 % de agua que padece la población tacneña.

Pero, qué el gobernador de Tacna se oponga sin reparar siquiera con una palabra la posición del Colegio de Ingenieros, de los rectores de las universidades de Tacna, del PET, de la Benemérita Sociedad de Señoras, de la Zofratacna, de la Cámara de Comercio, de la CGTP, entre otros organismos tacneños, que se pronunciaron a favor del proyecto, nos parece trágico e inconsecuente a Tacna.

Es verdad que Vilavilani II - Fase I, desde el 2018 fue rechazado por algunas comunidades del altiplano, que llegaron a quemar el campamento para exigir la paralización de la construcción del canal de Villachaullani, pero todo eso se debió al marasmo y dejadez de las autoridades cobardonas de Tacna que ya habían perdido los pantalones en algún enjuague.

Según el Colegio de Ingenieros, Vilavilani, es la única opción viable para garantizar agua a nuestra ciudad y asegura que ya no tiene otras fuentes hídricas válidas. Si no sale Vilavilani, se caerá en una situación grave para el pueblo y valle de Tacna, advierte el pronunciamiento del Colegio, que rechaza la perforación de pozos por su uso indiscriminado.

Además ¿quién responde ahora, por los 4 millones de soles invertidos en el avance del proyecto y en los casi 10 millones de soles que se perdieron por la carta fianza que tenía el PET para la construcción del canal de Villachaullani? Así se desperdicia en Tacna el dinero de todos los peruanos.

Lo grave de esta situación es que el capataz de la chacra no entiende que la democracia es el gobierno de las mayorías y que la democracia representativa demanda la participación popular, significa debate y respeto a la pluralidad. Aquí ya no hay espacio para los dueños de la verdad o de quien por ser gobernador cree que puede hacer lo que quiera.